Finlandia es uno de los países de Europa con la tasa de natalidad más baja en la actualidad, la cual se sitúa en 1.65 hijos por cada mujer. Es por esto que el país está llevando a cabo una serie de medidas para incentivar los nacimientos.
Según detalló BBC, en 2013 el pueblo de Lestijärvi tenía una población de 750 personas, por lo que se decidió iniciar un plan innovador: pagar la suma de 11.000 dólares (8.223.600 pesos chilenos) a cada pareja que quisiera tener y criar a un hijo en el lugar.
Desde la aplicación de este modelo han nacido 60 bebés en aquel pueblo, el doble de los nacidos en en los siete años anteriores a la instauración, calificada como exitosa.
Semanas atrás el pueblo de Miehikkälä, que posee una población de 2.100 habitantes, anunció la instauración de esta medida, bajo la cual se pagará los mismos 11.000 dólares a las familias que tengan hijos en su territorio.
No obstante, la administración de este pueblo indicó que este monto se irá pagando en 10 cuotas hasta que el niño cumpla los 11 años de vida.
De esta forma, las familias recibirán una cantidad de 1.100 dólares por año desde el momento que el bebé nazca. El propósito de esto, indican, es asegurarse que el niño crezca y se desarrolle dentro del lugar.
Desde la creación del plan en Finlandia, hace seis años, se estipuló que los extranjeros también pueden reclamar el pago del dinero en caso de estar en Lestijärvi, pero en su caso deben tener un permiso de residencia definitivo.
El caso de Hungría
El primer ministro de Hungría Viktor Orbán anunció en febrero de este año un controvertido plan para impulsar la natalidad dentro de su país, la cual se situaba en 1.45 hijos por mujer (una de las más bajas de Europa).
Según detalla el diario español La Vanguardia, este consiste en la entrega de créditos por 31.500 euros (25.719.454 pesos) a mujeres menores de 40 años que estén dispuestas a formar una familia en el corto plazo.
El plan consigna que el pago de ese dinero se irá retrasando en tres años a medida que nazca un descendiente, y la deuda quedará totalmente condonada en caso que el matrimonio forme una familia de cuatro hijos.
Junto con eso, el estado estipuló en otro punto ampliar el acceso de las familias a créditos bancarios para adquirir inmuebles, comprometiéndose a cubrir hasta 12 euros de la hipoteca desde que la pareja tenga su segundo hijo.
Cabe señalar que la iniciativa tiene un trasfondo nacionalista, para evitar que el país mejores sus niveles de natalidad por medio de la inmigración.
“Hay países occidentales que quieren solucionar el problema de la natalidad decreciente con la inmigración. La respuesta de los húngaros no es la inmigración”, detalló Orbán en ese momento.